jueves, 1 de marzo de 2012

Novena entrada.

♪ KILLING IN THE NAME - RAGE AGAINST THE MACHINE ♫

Sé que esta entrada debería ser la octava, pero he encontrado un borrador de la octava entrada inacabado y dado que estaba inspirada para otra, la acabaré luego. Podía haber cambiado el nombre pero prefería respetar el auténtico orden de entradas.
Y bueno, estoy en clase, pensando en todo un poco, y me dí cuenta de que lo que siento y me devora podría ser denominado como "Hastío Vital".
Tal vez algún lector no sepa qué es... Bien, el hastío, en general, es lo que te inspira algo que te aburre, te cansa, te vuelve apático, y te repugna. De ahí, el Hastío Vital sería estar cansado, aburrido, harto y repugnado por la vida; estás apático, no le ves sentido a nada, y lo único que haces en todo el día es esperar a que pase esta tortura, a que sea el día siguiente con la vana esperanza de que ocurra algo nuevo, de que cambie algo para que la vida acabe.
No me malinterpreteis, ese deseo de que acabe esa vida aburrida no implica la muerte; no digo que desee la muerte.
Para explicarme, diré que la palabra vida encarna varios conceptos. En primer lugar está la vida como lo opuesto a la muerte, lo que es básicamente bombear sangre y respirar. Luego está la vida como un mero periodo de tiempo. Por último, y este es el concepto al que me refería, concierne a la foa de vida, a lo que haces, a lo que aspiras, todos tus planes.
Mi vida en ese sentido se basa en ir a clase, perder el tiempo en la mayoría de ellas, cuando podría estar aprovechando mi vida, y todo para ALGÚN día tener un trabajo para pagar facturas, comida, transporte, etc.
Y esta es la situación de la mayoría de los estudiantes, echar horas a estudiar sin parar para conseguir un trabajo y producir producir producir.
En realidad es lo que hacemos, ¿Acaso nos planteamos cumplir nuestros sueños? ¿Acaso nos planteamos seguir nuestras pasiones? Cuando miramos al futuro nos vemos ganando dinero, éso es todo lo que se busca.
Y probablemente al leer ésto algunos pensaréis, ¿Cuándo hemos pasado de trabajar para vivir a vivir para trabajar? Yo os responderé, nunca.
Sí, nunca porque siempre ha sido así, por eso la gente juzga y margina al que decide dedicarse a aquello que ama en vez de dedicarse a un trabajo esclavo como todos los demás.
Si no vive como el resto de la gente, es diferente; si es diferente que todos los demás, no forma parte de la sociedad; si no forma parte de la sociedad, es un enemigo.
Así nos han vendido siempre la moto y así nos la intentarán vender siempre.